Duerme yo te cuido

Duerme yo te cuido


Que bella aura tiñe extraños horizontes
y la vida umbría; sedienta de sol y la tibieza del aire.

Que sosiego tiene mi alma, al saber que me amas
así regamos la vida de sueños de colores
de prados fecundos, caminamos descalzos sobre el rocío.

Luego el grato reposo, ya llega la noche
de esta paz merecida, el calor de la lar
todo a salvo de las tinieblas nocturnas.


Indecisa, melancólica, quiero poblar tus sueños
dejar racimos de besos sobre tus pestañas
soplar despacito la sonrisa que se dibuja en tu cara.


Mientras tanto que apacible resplandece tu rostro amado
qué suspiro al contemplarlo, eres ángel de amor.
Prisionera de tu amor, ni duermo para recoger cada suspiro
tuyo, amado mío.

Has llegado justo a darle consuelo a mi alma, la esperanza que necesitaba, yo te amo,
Vigilo tus sueños ¡Duerme sueña con visiones fantásticas!

Donde te entrego mi amor, sin reclamar nada
sólo permanecer silente y respirar tus aromas tibios
que llegan de tu perlada frente de sudores.


¿Me sueñas, donde yace tu alma cuando duermes?
Así aletargada me quedo encadenada a tu alma
presa sin cadenas soy, amor mío.


Nuestro crepúsculo huyó; la luna borra sus huellas
amo esta noche mágica, este silencio plagado de estrellas
te amo noche sombría; te amo luna, te amo sol porque ya…
Comienza nuestro día.

Nora Noemí Zeliz Pirillo
©Noemí_Alas

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